Entrevista a Jack McCoy (2010)
Jack McCoy es un mito vivo del cine de surf, y por ende del surf. Jack tiene 62 años, nació en California, su familia se trasladó a Hawai cuando era un niño y hace 40 años que decidió irse a vivir a Australia. Su carrera como realizador de cine de surf abarca desde la época de los single fins setenteros hasta los tiempos actuales. Si se hiciera una lista de las 10 pelis de surf más influyentes de la historia, es muy probable que él solito consiguiera al menos tres nominaciones. Suyos son títulos como Tubular Swells, Storm Riders, Kong Island, Green Iguana, Bunyip Dreaming, Blue Horizon, Sabotaj, The Occumentary, Free as a dog y muchas más. Ha trabajado con todas las grandes marcas y ha filmado a todos los mejores surfistas de los últimos 40 años. Ha creados mitos y es el culpable, en parte, de mi obsesión por Western Australia allá a principios de los 90. Jack estuvo en Bilbao para presentar el pre-estreno de su nueva peli: A Deeper Shade of Blue, el plato fuerte del Amstel Surfilm Festibal de Bilbao. Unas horas antes de la proyección, Roke y un servidor nos lo llevamos de pinchos por el caso antiguo de Bilbao para charlar un rato con él. Esto es lo que nos contó.
Como se convierte uno en realizador de surf?
Cuando era niño un día fui al cine a ver una peli de Bruce Brown. De hecho era su primera película. En aquellos tiempos el director de una peli de surf lo tenía que hacer todo: pegar carteles, vender las entradas en la taquilla, narrar la película en directo. Y en aquellos días el director se presentaba a sí mismo al público para luego presentar la película. Además podías ir a hablar con él en el descanso o al final de la misma. Esa interacción entre el realizador de la película y su público me encantó y pensé “yo de mayor quiero ser alguien así”… Empecé a surfear cuando tenía 8 o 9 años, en la costa Nordeste de Oahu, donde el viento le da mal casi siempre y las olas son una porquería… excepto unos pocos días al año cuando el viento sopla del Sur y se pone perfecto; precioso. Me acuerdo de uno de esos pocos días de olas perfectas, en el que yo estaba jugando en las orilleras, sin tabla, revolcándome en las olas. Y recuerdo que decidí no cerrar los ojos al pasar debajo de la ola, y la visión de la ola desde abajo fue tan espectacular que pensé… “como me gustaría poder hacer fotos de esto para enseñárselo a mi madre!!”
Y de la fotografía al cine…
No tan rápido!! Siempre tenía una cámara de fotos encima cuando era un niño, pero no fue hasta años más tarde cuando me compré una buena cámara y me instruí por mi cuenta a base de libros. Luego, durante un viaje a Singapur, me compré mi primera cámara buena, con un objetivo gran angular. Dick Hoole, que viajaba conmigo, se compró otra cámara con un teleobjetivo; por lo que nos convertimos en socios pues cada uno tenía lo que faltaba al otro. En Hawaii, antes de irme a los campeonatos del mundo como integrante de la selección de Hawai, estuve 3 años distribuyendo pelis de surf de otros. Así se evitaban venir a Hawai y yo hacía todo el trabajo para ellos. De este forma llegué a distribuir pelis de Greg MacGillivray & John Freeman por ejemplo (Five Summer Stories, The Sunshine Sea, Free and easy…). Luego estuve seis meses en Australia -con la excusa de los campeonatos del mundo-, y al regresar a Hawai me encontré con que mi novia se había casado con mi mejor amigo, harta de tener que esperarme. Justo entonces –durante el invierno 1970/71- MacGillivray & Freeman me ofrecieron distribuir sus películas por toda Australia; y pensé “Australia… todas esas preciosas chicas australianas que te reciben con los brazos abiertos cuando oyen un acento americano…” y me compré una furgoneta y durante 4 años me pateé todo el país enseñando sus pelis.
Y que os motivó a grabar vuestras propias películas en lugar de distribuir las de otros?
En aquella época había una empresa – Golden Breed- que compraba pelis de surf a todos los realizadores para utilizarlas bajo su propia marca. Y como Golden Breed compraba todas las pelis, nos dejó sin negocio pues no había pelis que enseñar. Entonces mi socio Dick Hoole un día me dijo: “oye, ya que no podemos enseñar las pelis de otros, por qué no hacemos nuestra propia peli de surf?”. Compramos una cámara y empezamos a filmar cometiendo absolutamente todos los errores habidos y por haber: desenfoques, la línea del horizonte torcida, etc…. Así que cuando la gente me pregunta cual es mi peli preferida les contesto siempre “Tubular swells” pues es la primera que hicimos. Lo hicimos todo: guión, filmar, procesar el rollo, editar, imprimir y pegar los carteles, vender las entradas, presentarla en los cines. Fueron dos años de trabajo simplemente para hacer la peli. Y luego la distribuimos igual que habíamos hecho con las otras: durante el intermedio sorteábamos carteles, invitábamos a los chavales subir al escenario para ver qué les parecía de la peli. Era un acto social. Es algo parecido a lo que vamos a hacer esta noche en Bilbao, y eso me marcó tan profundamente que al final se ha convertido en mi profesión y mi vida.
Parece que dispongas de la pócima de la eterna juventud. Has realizado algunas pelis entorno a surfistas que eran 30 años más jóvenes que tu (Sabotaj, Free As A dog…). Cual es tu secreto?
Tengo 62 años pero en mi mente tengo la sensación de que todavía tengo 18, 19 o 20 años. Tengo un radar bastante bueno de lo que sucede y sobretodo hablo con gente mucho más joven que yo; gente a la que pregunto constantemente qué les gusta y qué no les gusta y que esperarían encontrarse en una peli de estas características. No creo que sea nada especial: simplemente adoro lo que hago y hago todo lo posible para alcanzar mis objetivos. Cuando preparo una nueva peli siempre me hago una lista de objetivos que quiero alcanzar con esta peli. Por ejemplo cuando realicé Bunyip Dreaming para Billabong, uno de los objetivos era dar a conocer qué significa el término Billabong y reconocer la herencia de los aborígenes. Por eso había muchos mensajes disimulados con referencias a la protección y cuidado del medio ambiente, etc. Para mí el objetivo era conectar la empresa –en este caso Billabong- con la herencia aborigen del país. Por eso le dije a Gordon Merchant (fundador de Billabong), que teníamos que patrocinar a surfistas aborígenes y organizar un campeonato exclusivamente para ellos. Y lo más bonito es que Gordon lo vio como yo, pues compartimos los mismos principios y eso ha permitido que siguiéramos trabajando juntos. Como realizador que soy, he sido muy afortunado de poder disponer de un público que mira lo que hago, y siempre he creído que es mi deber contar algo positivo sobre el surf.
La llegada de Taylor Steele y su nuevo concepto de videos de surf a principios de los 90 constituyó una amenaza para tí?
El Sur de California es muy poderoso pues toda la industria está allí. Y a esa industria le encanta coger a uno de os suyos y convertirlo en el nuevo genio, en el nuevo gurú de lo que sea a lo que se dedica… Momentum salió cuando yo estaba estrenando Green Iguana, y conocí a Taylor Steele en el estreno de Green Iguana justamente. Era un chaval majo y le deseé mucha suerte. Él creó un tipo de pelis de surf que no existía hasta entonces. Yo siempre he tenido mucho cuidado con las tomas que escojo cuando estoy montando una película: que los colores sean naturales, la imagen nítida, el enfoque impecable, etc.. Taylor en cambio cogía las tomas que salían, sin importarle la calidad de la imagen, si la cámara se movía. Y a su público, los chavales de entonces, eso tampoco les importaba. Y eso sigue siendo así pues la mayoría de videos de surf que vemos por Youtube tiene una calidad de imagen pobre. Para mi esto está mal: me gusta ver tomas perfectas, grandes, nítidas. Mi reputación se basa en esa calidad de imagen. Así que no me sentí amenazado por la llegada de Taylor pues hacíamos cosas muy diferentes.
Tienes que tener en cuenta que durante mi carrera trabajé para Rip Curl; y realicé Storm Riders para ellos. Luego trabajé para Quiksilver y finalmente con Billabong. Cuando empecé con estos, muy a menudo le decía a Gordon (Merchant) “oye que me he enterado que Quiksilver va a hacer esto, y que Rip Curl lo otro y…” y Gordon un día me interrumpió y me dijo: “Jack, si pierdes un segundo más de tu vida preocupándote por lo que hacen los demás te voy a despedir; pues eso significa que no estás dedicando todo tu tiempo al proyecto que tenemos entre manos… No te preocupes de qué están haciendo los demás; concéntrate en lo que tienes entre manos y cree en lo que estés haciendo”. Cuando oigo que fulanito está haciendo esto y menganito lo otro… la verdad es que si me preocupase por ello, no tendría tiempo de hacer ninguna peli. Por eso nunca me he sentido amenazado… Su filosofía es muy diferente a la mía y se basa en filmar siempre desde el mismo ángulo. Y luego muchas pelis llevan el nombre de Taylor Steele …pero en realidad han sido realizadas por otras personas como The Drifter por Dustin Humphrey, y Sipping Jetstreams que fue filmada por dos cámaras excepcionales. Yo nunca podría poner mi nombre en algo que no he creado personalmente, pero ese es mi punto de vista. Pero Taylor Steele tiene el apoyo de toda la industria del surf del Sur de California y eso se nota. Hay muchísimos realizadores con talento en otras partes del mundo que nunca tendrán las oportunidades que Taylor tuvo.
Quienes fueron tus héroes o mentores? A quien admirabas?
McGillway/Freeman y Bruce Brown. A Bud Browne también, por que era un tío que filmaba desde el agua. Una cosa es estar filmando desde la orilla y otra estar en el agua interactuando con los surfistas, y luego regresar a la orilla y enseñarles las imágenes que has sacado. Y ese siempre ha sido mi punto fuerte. En muchas de mis pelis de finales de los 80 y principios de los 90 yo era el único cámara, y siempre traía mucho material desde diferentes puntos de vista, para que el editor tuviera material de sobras con el que trabajar. Para mi es absurdo sacar todas las tomas desde el mismo punto de vista… George Greenough también fue una de mis influencias.
Tus bandas sonoras también han pasado a la historia. Tuviste algunas canciones míticas en tus pelis: Men at Work, Coldplay que luego de que muchos de nosotros las descubriéramos en tus pelis se convirtieron en hits!!
La música es la emoción de la peli. Me encanta la música, crecí con los Beatles y siempre he sido capaz de reconocer un éxito cuando lo escucho. Siempre intento obtener la mejor música para mis pelis. Desde Tubular Swells que ya pude contar con Santana, los Temptations, Fleetwood Mac… gente muy famosa de aquella época. En Storm Riders quise encontrar una banda sonora coherente; tuvimos suerte con Split Ends y Men At Work que se convirtieron en grandes estrellas. Contribuimos a hacerles famosos. Normalmente me pongo en contacto con las discográficas para que me manden discos y acabo escogiendo el 90% de las canciones yo mismo. Y también tengo que decir que el secreto es también hacerles entrar (a los grupos, sus discográficas, sus managers) en mi mundo y enseñarles lo que hago y ser honesto: decirles hasta cuanto puedo pagar por utilizar su canción. Eso me ha funcionado con Split Ends, Men At Work, Foo Fighters, Coldplay… Básicamente a todos les gusta el surfing, y el sonido y la música es lo que dan vida a una película: un 50% de una peli es la música y el otro 50% son las imágenes.
Otro hito en tu carrera fue la serie de Billabong Challenges que realizaste, y como esos eventos cambiaron la estructura del surf profesional…
Gordon Merchant, o Billabong que era lo mismo, estaba harto de poner dinero en campeonatos profesionales cuyos emplazamientos y horarios eran escogidos en función de la cantidad de gente en la playa y no de la calidad de las olas. Entonces decidió crear los Billabong Challenges: campeonatos invitacionales en olas de primera calidad y con la condición de que se disputasen cuando las condiciones fueran muy buenas. En ese aspecto fuimos los primeros en demostrar que un campeonato de surf podía celebrarse en sitios con olas World Class, con un periodo de espera suficiente para asegurarse buenas condiciones y con premios en metálico bien jugosos. Después de la primera edición todo el mundo volvió a casa super ilusionado por lo que habíamos conseguido y por el nuevo rumbo que los campeonatos del WCT iban a tomar a partir de entonces. Gordon Merchant fue el visionario y el que arriesgó dinero para hacerlo posible; yo simplemente lo ejecuté.
He leído que a Andy Irons no le gustó como sale retratado en Blue Horizon; es eso cierto?
Es cierto. Lo que pasó fue que tenía una novia al principio de la película pero a mediados de la misma cambió de novia. Y a la segunda novia no le gustó que apareciera la ex en la peli. Estrenamos la peli en Australia cuando estaba recién acabada. Andy no pudo venir a ese estreno. Tres meses después volvimos a proyectar la peli; esta vez con Andy en la sala. Yo estaba sentado justo detrás suyo y de su novia, y cuando apareció la ex en pantalla, su novia le pegó un toque que incluso yo noté desde mi asiento. Así que la cosa ya empezaba mal. Por otro lado tienes que acordarte que Andy derrotó a Kelly Slater tras decírselo claramente que iba a pegarle una paliza en la final. En deportes como el boxeo esto es de lo más normal, y la gente espera esta actitud por parte de los púgiles. También en otros deportes: Jimmy Connors, McEnroe, Michael Schumacher… todos han sido grandes campeones y todos muy competitivos. Incluso Kelly Slater, que por aquél entonces ya tenía 6 títulos de Campeón del Mundo, no los había conseguido siendo un niño bueno precisamente. Muy poca gente lo sabe, pero Kelly es muy competitivo antes y después de cada manga. No duda en desestabilizar a su oponente antes de entrar en el agua… aunque sospecho que muchos de sus fans ignoran esa otra cara de Kelly. Bien, si te fijas, Blue Horizon acaba con Andy celebrando el título y Kelly en la ducha llorando. A raíz de eso muchos fans de Kelly empezaron a acosar a Andy cuando se lo encontraban, llamándole de todo y diciéndole que había ganado injustamente. Andy me llamó para quejarse de la imagen que había dado de él, y tuve que recordarle que yo me había limitado a grabar las cosas tal y como eran. A Andy no le gustó su manera de ser y mira qué pasó con Andy Irons después… perdió su garra y ese deseo de ganar a cualquier precio.
Cuando Gordon y yo hacíamos pelis cada vez que teníamos alguna imagen de –por ejemplo- Sunny Garcia cabreado o por el estilo nos alegrábamos; eso demostraba que tenían hambre, personalidad, ganas de luchar y ganar. Hoy en día el surf de competición está lleno de niños bonitos con dentaduras inmaculadas perfectos para vender camisetas y gafas de sol. El World Tour de hoy es aburrido; todos surfean igual, con tablas casi idénticas; no tiene chispa.
Y ya puestos, qué opinas de ese movimiento de pro soul surfers que ha aparecido en los últimos años?
Creo que todos estos “soul surfers” profesionales cobran por proyectar esa imagen y no tiene gran cosa con el verdadero significado de ser un soul surfer. Creo que deberían inventarse otro nombre. Justamente creo que hace falta más variedad y gente que se salga de los moldes. Por eso me encanta gente como Derek Hynd, los hermanos Marshall o Terry Chung. Todo empezó cuando los Beach Boys de Waikiki, que nadaban, buceaban, y enseñaban a los turistas a surfear para poder vivir cerca de la playa. Para ellos lo importante era estar cerca de la playa, y muchos seguimos intentándoles para así poder surfear todo lo que podamos. Jamie O’Brien no compite, surfea las mejores olas del planeta y no juega a ser un “soul surfer”. Tiene la imagen de ser un tipo arrogante, punkarra, un cabrón …pero curiosamente cuando le conocí me pareció un tipo con un gran sentido moral, espiritual y muy sensible. Sinceramente me impresionó. Pero no va de eso por la vida, no va de “soul surfer”. Tengo muchas ganas de ver su peli “Who is J.O.B.” por que en realidad nadie sabe quien es. Tengo que reconocer que me siento un poco culpable por haber elevado al rango de estrellas a algunos de esos “Soul Surfers”.
Quien te ha impresionado más como surfista y como persona?
En su época Gerry Lopez era el mejor. Nos conocíamos del colegio y seguimos siendo buenos amigos. Fue el primero en entrar dentro de los tubos a posta, y quedarse ahí y explorarlos. Trabajar con Joel Parkinson también fue muy agradable; muy fácil. Cuando viajas con varios pros, siempre hay dos o tres que no colaboran y les cuesta entender que se trata de un trabajo y que a veces hay que posar; o madrugar. Eso me dio una reputación de ser muy duro. Otros en cambio lo entienden y colaboran mucho, como Munga Barry o Rasta (Dave Rastovich). Munga incluso se vino a vivir a mi casa para entender mejor el proyecto. Me llevo muy bien con Kong (Gary Elkerton) de cuando hicimos Kong Island juntos. En el fondo que te lo pases bien juntos es muy importante, y se nota en la película. Wayne Lynch también fue un tipo muy majo con el que trabajar, y todavía es muy buen amigo.
El futuro de las pelis de surf pasa por el 3D?
La tecnología de 3D no es nada adecuada para filmar imágenes de acción. Ya lo miré hace tiempo. El problema es que tienes que tener las cámaras a cierta distancia entre ellas… y a cierta distancia del surfista en la ola. Pero cuando el objeto filmado se mueve necesitas controlar continuamente esa distancia. Y si además el sujeto se mueve sobre una forma - la ola-, que se mueve a su vez de forma poco predecible los resultados no nos buenos.
Qué peli, que no hayas hecho, hubieras deseado hacer?
Ashes and snow (www.ashesandsnow.org). Es una exhibición itinerante de fotografías alucinantes dentro de unos contenedores. Es brutal. Y luego hay muchas otras pelis que han tenido éxito comercial como Pulp Fiction o Mary Poppins. En cuanto a pelis de surf, hay pelis muy buenas que no son mías, pero materializan los sueños de otros; no los míos.
Hay algún tipo de pelis que no hayas hecho dentro de las pelis de surf?
Con Blue Horizon quería mostrar en qué se ha convertido el surf a consecuencia de la industria. En aquél momento pensé que Billabong tenía mucho valor por dejarme hacer ese tipo de pelis. Cuando se enteraron que no le había gustado a Andy Irons, en América empezaron a hablar mal de Blue Horizon. Yo siempre he pensado que es una peli muy importante pues enseña la realidad detrás de las estrellas del surf. Al principio, con A Deeper Shade of Blue mi objetivo era rendir homenaje a todas las verdaderas estrellas e íconos del surf en Hawaii, California y Australia. Pero no desde el punto de vista de los hechos… si no desde los detalles y explicando sus particularidades para que la gente sienta curiosidad y se preocupe por averiguar más por su cuenta. Pero me di cuenta que eso era demasiado para una sola peli y reconduje el objetivo a intentar describir qué exactamente es el surf, y cual es la verdadera esencia del surf. El 98% de la población que surfea en el mundo realiza ese maravilloso ejercicio natural sin tener la menor idea de por qué las cosas son como son, de la evolución de las tablas ni de cual es el alma de surf. En los orígenes del surf, antes de fabricar una tabla, los hawaianos agradecían y bendecían el árbol que iban a cortar y del cual sacarían la madera para hacerse sus tablas. Creo que ese tipo de cosas deberían saberse. El Capitán Cook observó a los indígenas surfear olas en sus viajes en el Pacífico, pero solo en Hawai vio a la gente de pie encima de la tabla. Eso es lo que hace a Hawai el origen del surf. Espero que la gente pueda participar de la historia y su relación con el surf sea más completa una vez entiendan los orígenes del mismo y su evolución. E intentar que el surf vuelva a ser lo que era antes: un divertimento.
Has filmado tú todas las escenas de A Deeper Shade Of Blue?
No. He filmado mucho y he utilizado cámaras HD por primera vez; y también he podido disponer de un control de zoom en mis cámaras acuáticas. Eso me ha permitido hacer cosas con las que siempre había soñado antes. También pude utilizar con motos submarinas. Eso me ha permitido seguir a los surfistas debajo del agua. He tardado 2 años en encontrar una y adaptar. Son bastante peligrosos, especialmente si te pilla una ola; ya he tenido un par de sustos.